El ensayo general y con vestuario

Por Pilin León

Se acercan las primarias para elegir el candidato de la unidad nacional que se enfrentará en las próximas elecciones nacionales al eterno candidato y por muchos años presidente de Venezuela, el comandante Hugo Chávez Frías.

Ya, tanto los partidos políticos como las distintas organizaciones que acordaron formar parte de la MUD (Mesa de la Unidad Democrática) afinan motores y destrezas, no solo por la importancia de conlleva poder ir con una propuesta avalada por la gran mayoría de la oposición venezolana, sino porque incluso las primarias sirven como ensayo con vestuario (como se podría decir en términos teatrales) para enfrentar la próxima contienda electoral por la presidencia nacional.

En términos estratégicos hay que organizar a los ciudadanos no solo como votantes, sino como colaboradores en la inmensa cantidad de tareas a emprender. Las organizaciones deben perfeccionar sus comunicaciones, organizar a los líderes en cada tarea, y si estas tienen fallas en estos primarios intentos, redefinir las competencias y ajustar las tácticas.

Pero esto no solo sucede en el territorio nacional. Es una tarea que trasciende fronteras porque hay venezolanos en casi todo el globo.

Ahora en más número que hace 12 años, los que vivimos en el exterior crecemos en números exponenciales y queremos no solo participar en una elección sino colaborar con nuestro voto a que esto sea posible.

La idea es organizarnos, inscribirnos en el consulado que nos corresponda y en el CNE (Consejo Nacional Electoral). Pero esto tiene otra cara con que ser visto.

Los allegados, amigos y conocidos o venezolanos que me he tropezado en los últimos días, de manera virtual incluso, con los cuales discutí el tema del cambio de residencia para un país extranjero (para efectos del registro de electores), en su gran mayoría me comentan la falta de confianza que este trámite les genera, y otros, los menos, quienes  han decidido plasmar su voto desde el exterior me han comentado los varios y distintos requisitos (según el consulado y país que les corresponde) que hay que presentar y que luego temen que dicha inscripción o cambio no llegue a las bases de datos del ente electoral y no puedan ejercer su derecho una vez llegado el momento de las elecciones.

Según me han explicado los que saben de esto, los requisitos son y deben ser los mismos sea cual sea el consulado y país donde este se encuentre. Dentro del período que impone la ley electoral y sus distintos decretos especiales según la contingencia, ningún venezolano con edad para votar e inscrito dentro de estos parámetros puede quedar fuera del registro.

Aunque quiera animar a través de estas líneas, sabemos que incluso los cambios de residencia dentro del mismísimo territorio nacional a veces no se llevan a cabo y suceden entonces ‘errores’ como que la persona ni siquiera aparezca inscrita para los comicios.

Estos errores son un riesgo que debemos asumir, porque más importante es que todos quienes estamos, por las circunstancias que sea, fuera de la patria podamos en conjunto librar la batalla junto con los compatriotas. Organizarnos, colaborar y vigilar que esos procesos fuera del país tengan tanta relevancia y trascendencia que marquen un hito dentro de las tradiciones electorales venezolanas.

Debemos comenzar opinando en las primarias, hacer de esto un verdadero ensayo general, con el vestuario casi que impecable, demostrando que lo que se verá en las elecciones presidenciales será el éxito rotundo de una obra donde cada venezolano es el actor principal.

Por Pilin León, Miss Mundo 1981

El Heraldo, 23 de agosto de 2011 

@pilinleon