¡Querido Pedro!

Querido Pedro:

Bajo este cielo azul-ilusión, recuerdo los incontables pasos que hemos dado juntos. De manos tomadas llegábamos cada mañana al Liceo Andrés Bello en Parque Carabobo, ante la mirada atónita de quienes no entendían la cercanía de los “hermanitos Escalona”. Cada ir y venir en nuestras mil peripecias por Caracas nos hicieron expertos en calles y caminos.

Hace seis años te fuiste buscando oportunidades. A mi mamá, a Esther y a mí nos alegra saber que estás bien, pese a la falta que nos haces. Cada foto en un bello lugar, cada sonrisa por estar experimentando otro mundo, cada vez que me has dicho que el pago por tu trabajo te alcanza para vivir y que al caminar por las calles de noche tu sientes seguro, yo he compartido tu alegría de todo corazón, porque es exactamente lo que quiero que suceda en esta bella tierra que nos vio nacer.

Han sido varias las veces que me has sugerido buscar una oportunidad afuera, y siempre te he respondido que me quedo a construir una Venezuela donde podamos disfrutar de lo que tú has disfrutado, sin que todos tengamos que irnos de aquí.

Tener esa Venezuela no es cosa fácil, no es un decir. Tal como han sido muchos los pasos que hemos dado para superar las dificultades vividas desde niños, junto a nuestra madre soltera y luchadora, asimismo, son muchos los pasos al frente que debemos dar para que nuestra madre Venezuela logre ser una tierra de prosperidad. En el año 2012, tendremos la oportunidad de dar un paso que significa mucho para los sueños que nosotras, tu familia, queremos ver hechos realidad: prosperidad, seguridad, oportunidades y paz.

Juntos en familia, a pesar de la distancia, decidiremos a través del voto cuál Venezuela queremos tener. ¿Recuerdas la impotencia que compartimos estando en casa de la Sra. Ricarda, mientras veíamos los resultados de las elecciones presidenciales de diciembre de 1998? Lamentábamos no tener edad para votar, éramos simples espectadores. Hasta que llegó nuestro momento: agosto de 2004. Estábamos emocionados, ¡Era nuestra primera vez! Muy «fiebruos» salimos tempranito a votar, nos dio la tarde en cola, pero no nos retiramos.

Tu centro de votación era el más cercano a la casa, y también era el más lento. Mi mamá preparó comida y el café como te gusta, fuimos juntas a llevártelo mientras esperabas para hacer tu primer voto. Y como bien acostumbrábamos hacer, cada episodio vivido el 15 de agosto de 2004 fue detalladamente relatado hasta la madrugada…

Sólo nueve meses después, te vimos partir a buscar «un lugar mejor». Durante seis años han pasado frente a mí tus fotos, tus chats y tus imágenes en la webcam; te he recordado con cada canción de nuestra adolescencia, estás presente en nuestros días. Por eso, cada lucha que hemos dado aquí es también por ti, por tener una Venezuela que brinde todo lo que has ido tan lejos a buscar.

Hoy estamos físicamente separados, pero hay algo más fuerte que nos une: El Amor. En el año 2012, tu mejor razón para votar no será tal o cual candidato, la mejor razón para hacer valer tu derecho a votar en el extranjero somos nosotras: Tu Familia. Más allá del Mar Caribe, tu opinión tiene que ser escuchada y respetada, porque con ella puedes hacer realidad los sueños de una familia que nunca se ha dado por vencida. Nuestra familia es grande, Venezuela es grande: ¡Te Amo!

Te hermana y amiga,

Nazly

@NazlyEscalona